martes, 7 de julio de 2009

SPOTIFY - LA EVOLUCIÓN DE LA MUSICA EN LA RED ( II )

Continuando con la evolución descrita en la anterior entrada, llegamos a una de las herramientas actuales más sorprendentes que he visto: Spotify.


Aunque no sean lo mismo, en principio el precursor más directo de Spotify sería Last.FM, pero va bastante más allá. Last.FM fue fundado en 2002, pero comenzó a popularizarse como tal el 2005, alcanzándo su auge el pasado 2008, y se trata de una radio on-line, que selecciona la música en función de tus gustos, al compararlas con las del resto de usuarios afines. La grácia por tanto es escuchar en un formato radio de toda la vida, música solo del tipo que te gusta (en teoria), y descubrir grupos/canciones que no conocías etc. Uno de los aciertos del servicio, es que hasta Marzo de este 2009, era gratuito. A partir de esta fecha todos los que quieran usarlo tendrán que pagar 3 euros mensuales, que no es mucho, y menos para un servicio que cuenta con un catálogo tan amplio, pero el problema es el mismo que expliqué en la anterior entrada sobre yousendit, inicialmente liderando el servicio de envio de archivos tipo rapidshare y megaupload. En internet estamos acostumbrados a hacerlo todo gratis, y cuando un servicio gratuito pasa a hacerse de pago, la gente dejó de usarlo y se pasa a los gratuitos, que son igual o incluso mejores.


Spotify fue lanzado el pasádo 2008, y se trata básicamente de un reproductor de música, con posibilidad de crear tus própias playlists etc, pero que en lugar de reproducir la música que uno tiene en el ordenador, te da la oportunidad de escuchar cualquier tema de los que cuenta en su base de datos. Esto de entrada no parece gran cosa, hasta que empiezas a usarlo y te das cuenta de su enorme potencial. No se trata de una web, si no de una aplicación que debes instalar en tu ordenador (aunque evidentemente sea necesario estar conectado a internet para usarlo), lo cual, a diferencia del resto de sitios webs donde puedes escuchar música on line desde internet, permite una velocidad de acceso a las canciones tan inmediata como si las tuvieras en tu disco duro. Y el catálogo al que tienes acceso es impresionante, no solo a discografias enteras, sino también a singles, ep's, recopilatorios, rarezas muy difíciles de encontrar etc. También propone una serie artistas similares, aunque esto es lo de menos.

De ahí mi admiración en la anterior entrada, comentando hasta donde había avanzado el acceso de los usuarios a la música. Una de las primeras cosas que me hizo ilusión con este programa fue buscar grupos y discos que tenía auténtica curiosidad por escuchar en los 90 (bueno, en mi caso en los 90, pero a los que les tocaron décadas anteriores lo mismo claro), discos o grupos que veías en catálogos, o reseñados en revistas que tenían muy buena pinta, pero que no tenías modo algúno de escuchar, y ahora en cuestión de segundos, es solo teclear el nombre del artista, e inmediatamente acceder a cualquier tema de su discográfia. También buscar canciones inéditas que sabes que existen y aparecen en singles que no habías encontrado en ningún sitio etc. Aun así, hay bandas que no se encuentran en Spotify, como Beatles, Frank Zappa, Pink Floyd o Oasis, y así mismo, no de todas las bandas lo puedes encontrar todo, pero igualmente el catálogo es impresionante, y que estos se añadan, probablemente sea cuestión de tiempo.

En definitiva, un paso de gigante, que si consiguen que llegue a ser rentable, podría suponer la solución a la actual y creciente crisis en la venta de cd's físicos, y una herramienta increíble para los que nos encanta la música.

No hay comentarios:

Publicar un comentario